*Por Ángel Rico
.
Desgraciadamente cada semana las noticias nos informan de
casos de maltrato en el seno familiar, donde: --un varón, con algún tipo de
complejo, maltrata a su mujer, mediante una sucesión de insultos,
humillaciones, ofensas, amenazas, vejaciones, bravatas, provocaciones y golpeos.
Varón que cuando les vienen las hambres, utiliza a esa mujer como cocinera,
camarera y objeto de sus desahogos primitivos, para seguir con la dinámica
habitual hasta que cuando la oxitocina o los complejos se desbocan, o ambas
cosas a la vez, el acomplejado varón amenazador y vejador acaba matando a la
mujer--. La noticia acaba informándonos, sobre si la fallecida había, o no,
presentado denuncias de malos tratos, y reiterando la generalización de que,
las actitudes violentas manifestadas en la edad adulta se originan en el seno
familiar, por lo general durante los primeros años de vida. Finalizando la
noticia con la recomendación de que este tipo de actuaciones no se permitan
nunca, que deben denunciarse y acabarse,
nada más se inicien, bajo el título, a mi juicio equivocado de: --Violencia de
género.
.
Mutatis mutandis, nos encontramos con casos de
actitudes similares de “violencia” en la política nacional, con ejemplos
concretos como, las actuaciones de los gobernantes de Cataluña, en relación a España,
donde: -- se maltrata a España,
mediante una sucesión de insultos, humillaciones, ofensas, amenazas, vejaciones,
bravatas y provocaciones. Y cuando no
tienen dinero para seguir pagando sus vicios, recurren a España para que les aporte el dinero necesario para que continúe su
fiesta. Eso sí, en ningún momento cesan los desplantes, incluso, cuando alargan
la mano para que les proporcionemos, de la caja común, lo que ellos necesitan.
.
Desde el gobierno catalán se utilizan distintos
subterfugios, como el “pacto fiscal” para no admitir que, en el fondo, lo que
quieren es un trato especial con relación al resto de los ciudadanos, que les
hagan más ricos, más altos, más guapos y más diferentes. Como lo demuestra
cuando el consejero de Economía del
gobierno catalán, Andreu Mas-Colell, dijo
en la BBC : -- "La situación actual es que Cataluña no dispone de otro banco que
el Gobierno español, somos contribuyentes en España y es normal que recurramos a los servicios bancarios del Tesoro español porque tenemos que
gestionar nuestra deuda y porque tenemos un objetivo presupuestario — (sic)
.
El presidente de la Generalitat , Artur Mas, ha asegurado que: --el
pacto fiscal es necesario e imprescindible pese al actual contexto económico en
el que en los mercados "no hay una mirada de complicidad sino de
desconfianza" hacia España--.
Falacia que es un claro insulto para el resto de contribuyentes españoles. Lo
que quiere Mas, es que los catalanes
no contribuyan a la misma Hacienda Pública en la que lo hacen los contribuyentes de Ciudad Real, Almería o Peralejos de las
Truchas. La Ley dice que todos
los españoles, independientemente de donde vivamos, tenemos que contribuir en
igual medida. La Ley
habla de ciudadanos, nunca de territorios.
.
Un servidor de ustedes podría, hipotéticamente,
argumentar: --que si las distintas entidades bancarias situadas entre mi
domicilio y mi trabajo, me dejasen robarles cada semana el dinero que necesito,
no tendría necesidad de trabajar--. Pues bien, lo que quiere el gobierno de Cataluña es algo similar a mí, hipotética,
petición de vista gorda de las entidades bancarias situadas a mi paso.
.
La justicia de trato que esgrime Artur Mas, mediante el sofisma del “pacto fiscal” para su gobierno,
sería una injusticia de trato hacia el resto de ciudadanos del territorio
nacional. Y parafraseando al nacional separatista --“ahora o nunca”— este es el
momento que desde el gobierno de España
se marquen las líneas de la igualdad
ante la Ley , de
los ciudadanos, de los territorios y de los gobiernos. La catadura del personal queda de manifiesto al asegurar: --que no permitirá una intervención política
de la Generalitat
"bajo ningún concepto"--, pero sin renunciar a acogerse al fondo de
liquidez autonómico. La pela es la pela.
.
Si se considera inadmisible por la sociedad, el argumento
justificativo del maltratador de: --la maté porque era mía--, igualmente debe
considerarse inadmisible el argumento humillante, ofensivo e insultante de los
gobernantes de Cataluña, que
quieren, mediante la retórica del –trato justo--, disponer de más dinero de la Hacienda
común. Ambos planteamientos muestran a un maltratador, a quienes hay que
hacerles ver la Ley y, en su caso,
las paredes de la prisión.
.
La disgregación del Estado,
no es la solución para salir de la crisis en que nos encontramos. En esta
situación, o remamos todos en la misma dirección, o nos hundiremos todos. Pero el planteamiento de que a unos nos toque
remar, mientras que en el bar de este barco a la deriva, el gobierno de Cataluña pida “otra” ración de gambas,
pensando que la cuenta la tendremos que pagar, los que estamos remando, es
totalmente injusto, y es la prueba más
evidente de que un maltratador es un maltratador, ya sea en el seno familiar, o
en la política nacional separatista.
.
O como diría Román
Paladino, “un hijo de puta, es un hijo de puta” (un fill de puta, és un
fill de puta) en los arrabales de Sevilla
o en la Plaça
de Sant Jaime, en Barcelona. (Perdón, es un decir)
.
Para que los jóvenes de hoy no sean los maltratadores de
mañana, hay que mostrarles hoy la
Ley , para que tengan claro que no se pueden traspasar las
fronteras de la libertad, de la igualdad y del respeto a los demás, Para que
lleguen a ser ciudadanos, hay que enseñarles con toda claridad que la sociedad
no admite, ni admitirá, ningún maltrato ni desigualdad. Ahora que la teoría
parece estar clara, veamos qué hace Rajoy
en la práctica política.
.
…He dicho!
.
*Es Presidente del
Instituto Hispano Luso
No hay comentarios:
Publicar un comentario