*Por Ángel Rico
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Le
contaré a usted, respetado lector, que hoy mientras tomaba un café sin meterme con nadie, me
abordaron tres miembros “pata negra” del Partido
Popular, para sondear mi opinión “independiente” en relación a “la desgana
del electorado para votar a su partido”. Me ví sorprendido, por partida doble;
la primera, porque unos ciudadanos que no viven en el planeta Marte, sino en España, no conozcan el “por qué”; la segunda, porque fuese a mí, a
quien pidiesen información aclaratoria.
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En
mi intención de sacarles de dudas, pretendí ilustrarles con varios ejemplos;
nacional, regional y local, a saber:
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Nacional: --Hoy día 20 de abril, los empresarios, en general y,
los autónomos, en particular, hemos tenido que ingresar en la Agencia Tributaria , el IVA correspondiente al primer
trimestre del año 2015; cuando la misma Agencia
Tributaria no ha devuelto a esas decenas de miles de autónomos el IVA,
pagado de más, correspondiente al año 2014.—Surgiendo la pregunta: ¿Esos autónomos tienen motivos para votar al PP
que así les trata?
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Regional: --Hoy día 20 de abril, un ciudadano que ha tenido que
ir al médico especialista, no por gusto, sino por estar enfermo, y el
especialista prescribe al enfermo una prueba específica –una TAC—para determinar
las causas de la enfermedad. Y cuando el enfermo va a que le den cita, en el
departamento correspondiente del Hospital
General de Ciudad Real, la cita no será antes del 15 de diciembre de 2015.
(Ocho meses después). Surgiendo varias preguntas: --¿Esta es la sanidad que Cospedal quiere para su hijo? O dicho
de otra forma ¿Esta es la sanidad que nosotros, los contribuyentes, queremos
para los nuestros? Y la fundamental, en relación al asunto que nos ocupa:
--¿Los ciudadanos con cita médica especializada para ocho meses después, tienen
motivos para votar al PP que así les
trata?
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Local: --Una ciudad, que se ha transformado en “Pitufilandia” al haberse
pintado de azul, las tres cuartas partes de las calles de la ciudad, haciendo
imposible el aparcamiento de vehículos sin pagar, el “pitufesco” impuesto; y
donde es posible comprobar lo innecesario de la norma, al constatarse los
numerosos espacios libres, en las diferentes zonas de “Villa-pitufa”, lo que ha
convertido en irrespirable, para los conductores, una ciudad que, antes de ser
abducidos por el pitufísmo, era encantadoramente normal.
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E,
imaginemos, además que en “pitufilandia” el departamento del “Área de Movilidad” le otorgase,
graciosamente, (de forma claramente bananera) a una o varias empresas privadas,
el privilegio para “realizar estacionamientos” en zonas prohibidas donde,
ustedes o un servidor, no podríamos estacionar como, por ejemplo: --las aceras
y las zonas de seguridad— (A la tarjeta 91, de Ciudad Real, entre otras, me refiero). Surgiendo la pregunta: --¿Un
ciudadano normal, y su familia, afectados por la insoportable búsqueda de
aparcamientos, zona blanca, tienen motivos para votar al PP que así les trata?
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Y
ahora supongamos, que los tres ejemplos descritos, (el conjunto) afectan a los
mismos ciudadanos: --¿Estos ciudadanos tienen argumentos para votar al PP? O ¿Para botar al PP?
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Tras
escuchar estos argumentos; uno de los PP
“pata
negra” arguyó: --Cospedal se
ha “cepillão” a todos los consejeros (el término “cepillão” lo utilizaron ellos
¡lo juro!) y no les lleva como candidatos en las elecciones del 24 de mayo--.
Por lo que surgió, la pregunta lógica: --¿Y hacía falta que oliese tanto a
averiado, para que Cospedal haya admitido
¡por fin! Que sus consejeros hicieron una mediocre gestión? Y, si fueron
mediocres ¿No hay una responsabilidad al mantener a un equipo con tan anodinos
resultados?
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Los
peperos, tras unos segundos pensando, dijeron: --Visto, así— Y ¿de qué otra manera se puede mirar esa
realidad? Procurando poner un tono serio, les dije: --¿para los afiliados del PP (y de otros partidos políticos) no sería
más leal decirles a sus dirigentes, que las cosas van mal, cuando mal van las
cosas, en lugar de tratar de convencer a los ciudadanos normales, que no les
duele, lo que realmente les duele? Joseph
Conrad, dijo: --Las palabras, como es bien sabido, son las grandes enemigas
de la realidad--
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Los
“pata
negra” se quedaron cabizbajos; un servidor al final, acepté el cohecho,
admitiendo que ellos pagasen mi café y me vine a contarle a usted, respetado
lector, lo que ocurre en la cara oculta del PP, donde en su realidad no ocurre nada que se corresponda
rigurosamente con la lógica.
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…He dicho!
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*Es Presidente del Instituto Hispano
Luso y además, votante.
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