*Por Ángel Rico
Me cuentan que: --muchos de los candidatos, del PSOE y Ciudadanos, ya confirmados por sus respectivos partidos para competir en las próximas elecciones legislativas, están contentos con Shakespeare, deseando que en la cúpula del Partido Popular, sigan con su particular (y absurdo) soliloquio –no hay que extrapolar, los resultados pasados, a las próximas elecciones, …no hay que extrapolar—
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El regocijo en Ciudadanos y PSOE, contrasta con el desconcierto de much@s potenciales candidat@s del PP, que no logran entender que: --sigan sin querer extrapolar los datos de las pasadas elecciones, con relación a las próximas; cuando desde que llegó Rajoy al gobierno, cabalgando sobre la mayoría absoluta más grande que se conoce en Democracia, elección, tras elección, el PP ha obtenido menos votos que en la elección, inmediatamente, anterior. Y así, en cinco (5) ocasiones. Porque, para quienes aplican el sentido común, acaban extrapolando lo pasado, en relación a lo por venir. Y, el resultado de dicha extrapolación les hunde en la melancolía.
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Muchos nos preguntamos ¿de quién será la calavera que, de forma icónica, sostendrá Rajoy, imitando la calavera del “bufón Yorick” con quién Hamlet solía jugar de pequeño en el palacio? Mientras soliloquia con su: –extrapolar o no extrapolar--. En cualquier caso, calavera en mano, Rajoy, ha llegado a la conclusión de que –más vale “yo, conmigo mismo” que lo bueno por conocer, como candidato a las próximas elecciones generales--. Y para justificar su necesidad, basará su estrategia en la “Teoría del Caos”: --En determinados sistemas cambiar las condiciones iniciales conducen a enormes discrepancias en los resultados-- ¡Que viene Podemos, que viene Podemos!
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Si, para satisfacer su
ego, fuese necesario que “arda el Partido Popular” como “ardió Roma” --¡Que así sea!-- Cuanta
petulancia para pasar a la Historia ; y no por
haber cumplido fielmente su programa electoral (de 2011) porque: --la Justicia es menos
independiente; hoy en demasiados territorios de España no se puede estudiar
en español; permitir (como cómplice necesario) que en una parte del Estado, no
se cumplan las sentencias de los tribunales; mantener una, vomitiva,
equidistancia entre los terroristas de ETA y sus víctimas; subida de impuestos;
desigualdad entre españoles en materias de Sanidad y Educación; elevar la edad de
jubilación; etc.— sino por permanecer tocando, unos dicen que el violón y otros
que el arpa, mientras se va perdiendo el poder en los distintos distritos
gobernados por los Populares.
¿Quiénes serán ahora los historiadores que, emulando a Tácito y Plinio el Viejo, cuenten como se desarrollarán los acontecimientos incendiarios de, tan mediocre, liderazgo popular? En los casos de ambos incendiarios, --Nerón y Rajoy--, también son culpables (en diferido) los, respectivos, consejeros –el liberto, Afranio Burro y Lucio Anneo Séneca, como mentores del primero; y Cospedal, Sáenz de Santamaría, Arenas y Margallo, (entre otros) como aduladores del segundo--. Por lo que: --entre todos lo mataron y el PP, solo, se murió--.
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La queja pública de Aznar, --“Tu posición está
seriamente comprometida”— respecto a Rajoy, nos descubre que: --la soberbia que se
contagia al llegar a La Moncloa , con el tiempo se cura--.
Porque fue la soberbia y la insolencia de Aznar (1996-2004) quien permitió la legislación que impide que
españoles estudien en español en Cataluña, y quien eligió para sucederle a un
perfecto extravagante. Y a los hechos me remito, siendo de aplicación la
“parábola de los talentos” (Mateo 25:14-30) --Y al siervo
inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de
dientes--. (Rajoy,
váyase preparando)
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Alguien (o varios) tendrán que liderar el Estado hacia el futuro, es previsible que dicho liderazgo tendrá que ser compartido (por colleras) porque no habrá mayorías absolutas. A mi juicio (y salvo mejor opinión), lo positivo será un “acuerdo a la alemana” (entre los partidos conservadores de Alemania -Unión Demócrata Cristiana, Unión Social Cristiana- y el Partido Socialdemócrata); incluso con tres (3) partidos que hagan posible la elaboración de las enmiendas constitucionales adecuadas. Para ello los electores civiles, deberíamos plantearnos: --qué podemos hacer nosotros por el país; en lugar de qué puede hacer el país por nosotros--.
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Los líderes partidistas, deben asumir las inquietudes, reales, de sus propias bases, porque la mayoría de las inquietudes son coincidentes en las bases de unos y de otros; y los datos de las elecciones en Cataluña, demuestran que: --los votos obtenidos por Ciudadanos son la suma, de los votos propios (de 2012) más los votos perdidos por el PSC y por el PPC en 2015.
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Poner sobre la mesa de
negociación asuntos que provoquen rechazo, en los potenciales interlocutores,
deberán ser recriminados por los “Barones” regionales. Lo importante es la suma
y, el compromiso por construir un Estado donde prevalezca: --“la igualdad de todo ante la Ley ”,
“la separación de poderes”, “una estructura del Estado ajustada a la
realidad” y “la asunción por el Estado de las competencias de Sanidad, Educación y Justicia”.
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Mientras en el, todavía, grupo mayoritario del Congreso y Senado, se les pretende hipnotizar con el sonsonete “extrapolar o no extrapolar”, deben ser conscientes que: --el principio del conocimiento de los defectos propios, aporta las herramientas para superarlos y eliminarlos--. Y, todos los protagonistas, previsibles, deben recordar aquello de Víctor Hugo: --El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad-- ¡Pues eso!
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