jueves, 1 de octubre de 2015

Las apariencias que engañaron al Gobierno

*Por Ángel Rico
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Usted, respetado lector, conoce mis críticas al Gobierno de España por, --según mi opinión--, estar más preocupado por las apariencias que por la realidad. Así ha ocurrido en materias de Transportes, de Energía, de Empleo (desempleo), de Agricultura y de Medio Ambiente (entre otros asuntos); donde lo que ha predominado ha sido el interés porque las consignas  y los lemas se repitan, las veces que fueran necesarias, hasta que la plebe tuviese un gesto como de creerse la propaganda. Un Gobierno que se ha retroalimentado con los halagos de los unos a los otros, y de los otros a los unos.
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El “estamos saliendo del túnel” ha sido el estribillo utilizado, para ocultar que, en la actualidad, en España el desempleo es más del doble, de la media de la Unión Europea; y que el tirón industrial no acaba de aparecer, pero desde el Gobierno de España se mantiene “el teatro, el puro tea-tro” de cara a la ciudadanía. Casos como la implicación de ministros varios, apoyando proyectos de distintas sociedades anónimas en negocios (para sí mismos) en países árabes, como el proyecto del Ave a La Meca,  con muy poco valor añadido para los intereses de los españoles, toda vez que: --la mano de obra utilizada es pakistaní o vietnamita; el cemento, la maquinaría de obra civil, etc., es puesta por los contratantes y, salvo el diseño de la obra, que se ha podido realizar en Madrid, Londres o Nueva York y, en el mejor de los casos, solo el Jefe de obra podría ser español, porque todo lo demás es foráneo. Por lo que el beneficio de las influyentes gestiones de distintos ministros, --con la sonrojante imagen de la ministra de Fomento, disfrazada de mujer sumisa y obediente musulmana, para no ofender a los sátrapas árabes—no aportan beneficios directos para los contribuyentes españoles.
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Usted, respetado lector, se estará preguntando: --¿Cómo conoce, un servidor, esos datos internos?—  Respuesta: --Porque, nuestra consultora, asesora a varias pequeñas empresas, subcontratistas de las grandes del IBEX35, que han firmado los supercontratos, que sirven para que algunos, con información privilegiada, se enriquezcan. --¿Cómo pueden producirse esos enriquecimientos?— Sencillo; si usted tiene información privilegiada, en relación a que “una embajada de ministros del Gobierno de España, van a viajar a un país árabe a defender a alguna (o varias) sociedades anónimas, en relación a la realización de alguna macro-obra de ingeniería civil”, le basta con adquirir el lunes, de alguna de las empresas que serán, gubernamentalmente, apadrinadas, acciones por valor de 100 euros; y dos días después de que la noticia del viaje gubernamental a los países árabes, haya aparecido en los noticiarios televisivos de la noche, podrá vender sus 100 euros en acciones, por 125 euros. Porque las acciones de esas empresas favorecidas, con seguridad, habrán subido.
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Ese “teatro interesado” con nulo beneficio directo para los intereses españoles, en ocasiones, es contraproducente y negativo;  como está ocurriendo en: --El Ave a La Meca y la ampliación del Canal de Panamá--, donde, los retrasos sobre los compromisos adquiridos en la firma de los contratos, ha obligado a que, incomprensiblemente, varias delegaciones gubernamentales, se hayan desplazado a los países denunciantes, para que las empresas que incumplen los contratos, no tengan penalizaciones.
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Similar interés por las apariencias y el teatro, han evidenciado al Gobierno de España, en el denominado “Affaire Volkswagen” que ha obligado al Ministro de Industria, Energía y Turismo, a pasar del: --Qué buenos son los padres salesianos, qué buenos son que nos llevan de excursión--, en relación a lo, chupi canela, del plan PIVE, a que: --la Abogacía del Estado reclamará a Volkswagen, las ayudas recibidas en relación al PIVE—(Ojo, no confundir con “pibe”. Aunque la chulería del Gobierno, en este asunto, nos recuerda a los pibes bonaerenses que destacan en chulería).
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Lo de la “chulería” no pretende ser una falta de respeto; sino la constatación de que, el Gobierno, dio más importancia a firmar acuerdos, con empresas de renombre internacional, que decían (las empresas) que sus vehículos eran “eficientes desde el punto de vista energético y no contaminantes por CO2”, en lugar de confirmar que era verdad, lo que las empresas decían. Pero claro, ¿cómo iba a poner el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, en duda lo que decía Volkswagen? Pues bien, ese cretinismo desteñido, ha conseguido que: --en este momento, en España se hayan superado en mucho, las cotas de CO2 emitidas--.
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Lo más grave no es que, en España,  estén implicados, en esa excesiva emisión de CO2, centenas de miles de automóviles del grupo mencionado. Lo peor, es que: --el 63 por ciento, del CO2 emitido en España, proviene de un sector tan difuso como “el transporte de mercancías por carretera”, pues bien, más de una de las grandes compañías de camiones de gran tonelaje que comercializan sus vehículos en España, en los motores de sus camiones vendidos en los años 2013, 2014 y 2015, incluyen la misma pieza, que en los coches corruptos, fue facilitada por el proveedor de componentes “Bosch”— Ergo, se podrá concluir que: --El CO2 emitido, por el transporte en España es muy superior al que aparecía en los datos gubernamentales—Por lo que, las certificaciones del Ministerio de Industria, Energía y Turismo, del Gobierno de España, en relación a “la eficiencia de uso del combustible en el transporte y sus emisiones de CO2, están desacreditadas”.
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Estamos inquietos, esperando el comunicado oficial del Ministerio de Medio Ambiente, sobre el exceso de CO2 emitidos por los diferentes tipos de vehículos a motor; porque resulta cómico que la Ministra, García Tejerina, considere necesario que en París (en la próxima cumbre del Clima) se fijen unos objetivos a más corto plazo, como la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en un 60 por ciento, sobre las emisiones del año 2010. Recalcando, en el último consejo de ministros de Medio Ambiente de la UE: --que París debe sentar las bases para que la lucha contra el cambio climático sea algo permanente. Es decir, “llegar al año 2050 con un crecimiento que tenga una muy inferior emisión de gases de efecto invernadero”. A este respecto, la ministra consideró necesario que se pueda revisar permanentemente el estado de situación de las contribuciones, es decir, si son suficientes o si necesitan ser revisadas para ir un poco más allá, y poder hacer una evaluación cada cinco años;  En concreto, la UE se comprometió en marzo a reducir en al menos un 40% sus emisiones contaminantes hasta 2030--.  (García Tejerína, dixit) Y al mismo tiempo,  se tolere la inmensa tomadura de pelo, en relación al CO2 real emitido en España, mientras se forma parte de una tragicomedia gubernamental, que insulta la inteligencia y el sentido común; porque ya lo dijo el clásico: --“Aparentar” lo que no eres es como querer ser Dios, simplemente jamás lo lograrás;  “aparentar” tiene más letras que “ser”; y las apariencias no engañan, ponen a cada cual en su lugar.— ¡Pues eso!
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…He dicho!
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*Es presidente del Grupo de Empresas Agrarias & Gestión de Energía Agraria (GEA&GEA)

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