martes, 1 de enero de 2013

Abismo político


*Por Ángel Rico
.
La característica más singular de la Constitución de Estados Unidos de América, es --que fue diseñada pensando en la efectiva doctrina de la división de poderes, donde siempre hay un “contrapeso” para aplicarlo a quien ejerce el poder--. Eso es lo que ha ocurrido en Estados Unidos en relación al “abismo fiscal”. Sin pretender entrar al fondo del asunto, lo evidente es –que el Presidente Obama—ha fracasado en su objetivo de controlar el déficit mediante la –conjunción de subidas de impuestos y disminución del gasto público--. La mayoría republicana del Congreso, ha impedido (de momento) la cuadratura del círculo obamiano.
.
Obama, tenía la creencia de que bastaban sus deseos para que estos –sus deseos—se convirtiesen en hechos políticos La realidad le ha vuelto a mostrar que –solo con talante no se gobierna, el mundo, ni Estados Unidos--. Seria bueno que en esta última legislatura tuviese claro este principio, a la hora de tomar  decisiones que afecten a todos nosotros.
.
La figura del Presidente Obama, no pasará a la Historia por ser un líder especialmente ilustrado, como quedó de manifiesto en el discurso que pronunció en la universidad de El Cairo, el 4 de junio de 2009. De aquella declaración, tras recordar que: --su nombre completo es Barak Hussein Obama—han venido todos los fiascos de las “primaveras árabes” donde los ciudadanos de los países implicados están hoy, más lejos que entonces, de la democracia, la libertad y de la utilización de los Derechos del Hombre.
.
Este político que, según mi amigo Ricardo: --cuando desciende el “Air Force One” da la sensación que se acaba de poner un tanga dos tallas menor—adquirió los vicios de quienes son premiados de forma preventiva, como ocurrió en el caso del Nobel de la Paz, que recibió sin tener méritos para ello. De ahí las críticas de los propios estadounidenses que piensan que: --“ha dejado de liderar la economía”, “no usa los poderes domésticos de la presidencia de manera efectiva”, “no comunica empatía con los estadounidenses que están bajo presiones económicas”, “se apoya demasiado en bancos y banqueros”, “no es un buen negociador”--. Porque se ha convertido en lo que es, un político que solo busca gustarse a sí mismo. Realidad política y personal que quedó de manifiesto en su patética aparición ante la prensa, en la Casa Blanca, la tarde del pasado 31 de diciembre, con un grupo de ciudadanos que se supone representaban a la clase media, que estaba a punto de librarse de las subidas generalizadas de impuestos.
.
Ese “esperar hasta que no hay mas tiempo” (marca de Obama) para tratar de resolver los problemas, no auguran un buen 2013. Con Irán, deseando demostrar al mundo que dispone de artefactos nucleares y unas ganas de ser protagonista, dificultando la navegabilidad por el Estrecho de Ormuz, lo que supondría de inmediato, el encarecimiento del petróleo. Y los Hermanos Musulmanes haciendo tiempo para tomar el poder en Siria, y hacerlo efectivo en Egipto, Túnez y Libia, con la Sharia como único código de derecho.
.
Lo que podría parecer un pesimismo enfermizo, por mi parte, es solo la suma de unos hechos que están ahí, para quien quiera verlos, asumirlos y sumar dos más dos. Y como dijo, Stephen Covey, gurú de esta administración: --Lo más importante, es que lo más importante siga siendo lo más importante--. Con Obama no está claro qué es “lo más importante” y me remito a su defensa del “Medicare” que, a las primeras de cambio fue trocado en sus conversaciones con los republicanos. Este programa social, que hipotéticamente beneficiaria a los hispanos y a los mayores de 65 años, en realidad es una forma de engordar las cuentas de resultados de las compañías de seguros participantes. Tan es así, que a la primera crítica de la Cámara de Representantes, Obama aceptó modificar la propuesta estrella de su primera legislatura, demostrando que tiene principios: --estos son mis principios, si no le gustan, tengo otros--.
.
Para evitar la imagen de derrota, y el pánico al “abismo fiscal” muestra el acuerdo al que ha llegado con el Senado, es decir, consigo mismo. Por lo que vuelve a ser necesario recordar lo que dijo Covey: --La manera que vemos el problema, es el problema--.
.
…He dicho!
.
* Es Presidente del Instituto Hispano Luso

No hay comentarios:

Publicar un comentario