lunes, 17 de mayo de 2010

Pedro Passos Coelho, el cambio de la esperanza en Portugal

Por Ángel Rico *
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El actual líder del principal partido de la oposición (PSD) en Portugal, Pedro Passos Coelho, en un gesto sin precedentes, pidió perdón a los portugueses, por la actuación de la clase política que ha llevado a Portugal a estar sufriendo una enorme crisis económica. Que ha forzado, entre otras cuestiones, la bajada de sueldos de los funcionarios, la subida del IVA, y el aumento en el pago del rendimiento por el trabajo personal. Actuaciones drásticas que requieren el apoyo de la oposición y que, Passos Coelho, a facilitado al Primer Ministro, José Sócrates.
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Aunque en las dos últimas legislaturas el PSD no ha tenido responsabilidades de gobierno y, por tanto, no tiene responsabilidad directa en la actual situación, su líder es consciente que sin el apoyo coyuntural del PSD, Portugal difícilmente podrá salir de la crisis. Lo cual es digno de tener presente.
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La petición de perdón a los ciudadanos portugueses de Passos Coelho, por el apoyo dado al actual gobierno a la hora de tomar unas medidas impopulares, supone aceptar una cuota de responsabilidad en la urgente solución de la crisis. Y, posiblemente, soportar la falta de comprensión de los votantes social demócratas, que hubiesen preferido acogotar al incompetente gobierno socialista actual. Pero, también, ha puesto de manifiesto la talla política de Pedro Passos Coelho, responsabilizándose de la tarea de gobierno, antes de llegar por la razón de los votos al Palacio de São Bento.
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Es indudable que el gobierno socialista portugués tiene poco margen de maniobra, tiene ninguna credibilidad y está condenado a forzar unas elecciones generales anticipadas. Momento en el que Pedro Passos Coelho, obtendría la responsabilidad directa de gobernar Portugal.
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Los malos hábitos portugueses de los últimos años deben cambiar. El hecho que Portugal, en el pasado, no haya solicitado de la Unión Europea todos los fondos posibles, para su desarrollo, es un dato significativo. Todos los proyectos posibles, bien vía SUDOE, INTERREG, etc, a los que la iniciativa privada portuguesa pudo optar y no lo hizo, pone de manifiesto, un peligroso letargo de la sociedad civil en la participación socio económica, que también colaboró, por omisión, en la situación actual de Portugal.
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Las ayudas derivadas de la PAC, desaparecerán para los agricultores después del 2012. La realidad rural de Portugal se verá directamente afectada. Por ello, es urgente la reforma de las mentalidades del interior de Portugal. Animando a liderar o formar parte de proyectos de desarrollo rural conjunto, con socios españoles, que permitan poner en valor realidades como: el “turismo de interior” y las “energías renovables”. Sectores, ambos, con un inmenso potencial tanto en la creación de empleo, como en la consecución de un imprescindible valor añadido y la fijación de la población al territorio.
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Si con una mano, Passos Coelho, ha cogido (para que no se derrumbe) al titubeante gobierno central, con la otra, debe coger y animar a los gobiernos municipales, para que con el apoyo de la sociedad civil, grupos de acción local, asociaciones de agricultores, etc., se impliquen a fondo en todo lo que supone los sectores señalados. Convenciendo al (todavía) Gobierno de la República que no es bueno, seguir aceptando el chantaje de la gran petrolera portuguesa, que está impidiendo de facto, el desarrollo del enorme potencial que tiene la producción de biodiésel. Lo que redundará en más futuro para todos los portugueses.
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Los vecinos de Portugal, tienen que imitar estas actuaciones políticas, aceptando que cuando en la oposición no se hacen las cosas bien, como estaba ocurriendo con Manuela Ferreira Leite, es imprescindible el cambio, para devolver la esperanza al pueblo y, llegado el caso, encargarse de la responsabilidad de gobierno. España tiene en su “Esperanza” del cambio, las mismas posibilidades que se has demostrado positivas en Portugal.
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---He dicho!
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* Es Presidente del Instituto Hispano Luso


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